La historia humana es la historia de cómo las personas nos relacionamos y nos juntamos para sobrevivir. Por milenios nos hemos reunido para colaborar en grupo y bajo diversas formas: como aldeas, pueblos o ciudades, como clubes de fans, parroquias o grupos musicales, como partidos políticos, sociedades de fomento o teams verano-invierno.
Las DAO son una forma de organización propia del ecosistema cripto. La sigla vale por Decentralized Autonomous Organization, o sea organización autónoma descentralizada. En claro: agrupaciones de personas reunidas en torno de una causa o una misión, que se valen de herramientas blockchain como smart contracts y tokens para realizarla.
Qué son las DAO
Desde lo conceptual, las DAO aparecen como un modo efectivo y seguro de trabajar junto a personas de intereses similares sin que importen las fronteras. En la práctica hay muchas formas tradicionales que pueden ayudar a entender una DAO, pero para empezar pensá en algo que está en algún punto entre una cooperativa y una ONG. Es que las personas aportan fondos colectivamente, pero la DAO puede disponer de ellos no solo para inversiones, sino también para obras de fomentismo, de caridad o ambientales, por ejemplo.
Las DAO son, en definitiva, grupos de personas que colaboran por algún interés en particular o con algún fin, mediante internet y usando herramientas y plataformas cripto.
Como en la vida offline, en internet también hubo siempre comunidades que se reunían por algún interés compartido, que podía ser desde restaurar un edificio histórico hasta hacer tareas de conservación de un ave, pasando por colectas, construcciones o eventos. Las DAO son la evolución de eso, cruzada con la escalabilidad para el manejo de fondos que ofrece cripto.
En resumen, una DAO es una organización de personas que se reúne alrededor de un interés o una misión, que se fondea con cripto y que coordina sus acciones mediante un set de reglas transparentes escritas como código de computadora en un smart contract, y publicadas y aseguradas en blockchain. Esto asegura que funcionan de forma transparente y automática.
Cómo se organiza una DAO
Las DAO funcionan con un tesoro en cripto. Todos sus participantes aportan a ese tesoro, así sea en Ether (la moneda de Ethereum) o en otro token, y cualquier aportante puede proponer ideas y proyectos a la consideración grupal, tanto para que se vote qué hacer con los fondos como para debatir qué camino seguir con la DAO.
En las organizaciones descentralizadas, nadie tiene la autoridad completa para acceder al uso del tesoro sin la aprobación del grupo. Sino que toda decisión se resuelve a partir de propuestas y votaciones que aseguran que todos los miembros de la organización tengan voz, voto y participación. Sin esa aprobación es imposible disponer del tesoro cripto, que está asentado en blockchain y protegido por el smart contract de la DAO.
En las DAO no hay directores ni CEOs que autoricen acciones o destinos de fondos. Todo el registro económico es abierto e inmutable, porque está asentado en blockchain. Y las formas en las que se resuelven las interacciones, votaciones y movimientos de fondos están todas a la vista en el propio código de la DAO, que es abierto y visible.
En ese sentido, las DAO ayudan a resolver inconvenientes típicos con los manejos de fondos de las instituciones y organizaciones civiles, donde toda la responsabilidad recae en una o unas pocas personas, y se necesita la máxima confianza hacia los que custodian los fondos y los que conducen el grupo.
DAO, tesoro y smart contracts
El smart contract de una DAO es su carta constituyente: define las reglas de la organización pero al mismo tiempo también custodia el tesoro del grupo. Una vez que el contrato está corriendo en la blockchain correspondiente (Ethereum también es referencia en materia de DAO), nadie puede modificar sus reglas. Esto significa, por otro lado, que nadie puede gastar los fondos sin la aprobación colectiva.
El único mecanismo es una votación cuyas particularidades también quedan establecidas en el smart contract. Cuando una propuesta o un grupo de propuestas es sometido a votación, los tenedores del token de la DAO pueden elegir y el propio smart contract procesa el resultado y disponibiliza los fondos para la opción ganadora.
El proceso puede ser más lento que el de una organización estándar, es cierto, pero ese mecanismo hace que las DAO puedan prescindir de tener una autoridad central sin perder capacidad resolutiva y ejecutiva.
Ejemplos de DAO
En el ámbito de las DAO pueden darse diversas propuestas. Existen desde protocolos DeFi como Uniswap o AAVE (que funcionan como DAO) hasta comunidades de holders de NFT, pasando por fondos de inversión colectivos y todo tipo de acciones de colectas y donaciones.
Los campos donde más están avanzando las DAO son:
- La tecnología (hay DAOs que compran NFT colectivamente, que fondean proyectos o que crean productos web3)
- La gobernanza (como forma de eliminar la burocracia en favor de un sistema más democrático y participativo)
- La filantropía (con la posibilidad de coordinar acciones de rescate, donaciones y colectas transparentes y confiables)
- Los bienes raíces (porque permiten la compra colectiva de predios, edificios, estadios, parkings y terrenos, tanto reales como del metaverso)
- Y todo tipo de herramientas comerciales y financieras (de protocolos DeFi públicos a PyMES cooperativas, pasando por tokens, criptomonedas y hasta bancos descentralizados).
Un ejemplo reciente bien resonante fue el de ConstitutionDAO, grupo que en 2021 intentó comprar un ejemplar de la Constitución estadounidense que salía a subasta. Los impulsores comunicaron el proyecto, hicieron su primer fondeo y recibieron aportes en cripto. Ofertaron pero no pudieron ganar la subasta, así que le devolvieron los tokens a cada persona.
Pero el mayor y primer caso de una DAO fue justamente The DAO. Fue un proyecto para montar una plataforma de código abierto de fondos de riesgo para inversión en proyectos cripto. La intención era reunir fondos y luego deliberar para ver a qué iniciativas se les daba financiamiento. Consiguieron casi 13 millones de unidades de ETH, pero el smart contract tenía una vulnerabilidad y un hacker logró explotar el error para retirar 3,6 millones de ETH.
El impacto del ataque fue tal que la comunidad de Ethereum terminó realizando una bifurcación a la cadena con un registro nuevo donde el ataque no había sucedido. Esto generó el gran fork de Ethereum, que desde entonces quedó dividida en Ethereum Classic y la Ethereum de uso regular.
Cómo sumarte a una DAO
Si tenés un interés determinado o una idea de un proyecto, podés empezar investigando en internet (particularmente en Twitter y en Reddit, donde funcionan grandes comunidades cripto) para ver si existe alguna DAO, un proyecto o una comunidad sobre el tema.
Aunque muchas iniciativas no llegan a DAO, igualmente existen comunidades en Discord o en Telegram dedicadas a asuntos específicos, y a veces realizan acciones colectivas utilizando cripto.
Para tomar parte de una DAO hay dos formas. Muchas tienen su propio token de gobernanza, y algunos de ellos se pueden conseguir en exchanges descentralizados o en plataformas cripto. Es el caso de AAVE o de UNI, el token de Uniswap, que podés conseguir en Ripio. En otros casos, este token se consigue aportando liquidez. De la forma que sea, la tenencia del token permite tomar parte en la votación.
Pero también hay otras DAO cerradas, a las que no se puede "comprar el acceso" en el mercado abierto de cripto. Por el contrario, para formar parte se debe realizar una propuesta específica: "Quiero sumarme por esta habilidad o por este capital o por este proyecto". Los miembros participantes evalúan las propuestas y deciden sobre ellas y sobre la incorporación de la nueva persona a la DAO.
Cualquiera sea el caso, la importancia de las DAO es que son una forma de organización mucho más acorde a la era de la web3, donde las comunidades de internet empiezan a tomar las criptomonedas como herramienta colectiva para llevar adelante proyectos de los más diversos.
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